Capitanía de Puerto aumentó a 9,7 metros calado operacional en Zona Portuaria de Barranquilla
Pese a la alta sedimentación que se presenta en el río Magdalena por las extremas condiciones océano atmosféricas registradas en estación húmeda, la Capitanía de Puerto de Barranquilla aumentó a 9,7 metros el calado operacional en el canal de Acceso a la Zona Portuaria de Barranquilla (ZPB), entre el sector de Bocas de Ceniza y el kilómetro 11 al interior del canal.
Según el Mensaje de Seguridad 215 del 15 de noviembre de 2020, emitido por la Capitanía de Puerto de Barranquilla de la Dirección General Marítima (DIMAR), el calado operacional aumentó de 9,3 metros a 9,7 metros para permitir el cargue de los buques en condiciones de seguridad. “Se estará informando avances y condiciones del sector, las intervenciones que se están realizando y las afectaciones que se presentan”, indica el Mensaje de Seguridad.
Pedro Pablo Jurado, director de Cormagdalena, destacó la decisión de la Autoridad Marítima porque genera mayor certidumbre a la actividad portuaria en beneficio de la ciudad de Barranquilla. “La coordinación interinstitucional es muy importante en momentos donde el río presenta niveles de sedimentación muy altos. De ahí las ventajas de contar con una draga permanente en la ciudad que permite desplazarla según las recomendaciones de la Autoridad Marítima”, destacó.
Después de trabajar una semana en el sector de Bocas de Ceniza, la draga china Hang Jun 5001 se trasladó desde el martes anterior a realizar labores de dragado entre el KM 11 y el KM 13, al interior del canal de Acceso a ZPB. La intención es mantener las mismas condiciones de calado a lo largo de los 22 kilómetros del canal de Acceso.
Permanente monitoreo al río Magdalena
El director de Cormagdalena informó que, en coordinación con el Ideam, se hace seguimiento permanente a los niveles del río Magdalena, particularmente en los sitios críticos donde se presentan fenómenos de erosión y socavación de orillas como son Salamina, El Piñón y Pivijay, en el departamento de Magdalena, y Ponedera y Suán, en el departamento del Atlántico.
“Las fuertes lluvias de la última semana han generado un aumento en el nivel del río que hasta el momento no registra mayores riesgos para las poblaciones ribereñas. Sin embargo, estamos haciendo permanente monitoreo a las alertas que emita el Ideam para actuar junto con la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres y las autoridades departamentales y municipales”, explicó Pedro Pablo Jurado.
En Salamina, departamento de Magdalena, se han realizado hasta el momento 118 ciclos de trabajo (con corte a sábado 14 de noviembre) removiendo 61.017 metros cúbicos de sedimentos, los cuales se han descargado en los sitios de socavación con el propósito de restablecer los taludes destruidos. Las obras de dragado inducido y controlado contratadas por el Gobierno Nacional buscan desacelerar los fenómenos de erosión y socavación que se presentan en la margen derecha del río Magdalena, entre los municipios de Salamina y El Piñón.